Caja Rural de Utrera cierra el ejercicio 2020 con un beneficio de 1,2 millones de euros

Utrera | Actualidad Caja Rural de Utrera celebraba, el pasado 10 de junio, la Asamblea de Socios en la que se ha presentado el Informe Anual 2020 a estos para su aprobación. Esta se desarrolló cumpliendo, con rigor, por parte de los asistentes de todas las medidas de seguridad marcadas por las autoridades sanitarias.

El 2020 ha sido un año difícil para todos, marcado por la pandemia del Covid-19 y que ha supuesto un parón económico sufrido por todos. Aún así, Caja Rural de Utrera ha mantenido su “compromiso hacia los socios y clientes atendiendo las necesidades financieras dentro de nuestro ámbito de actuación”, como explicaba Antonio Cerdera, presidente del Consejo Rector.

Como Caja Rural de Utrera viene haciendo desde 1964 se ha “volcado” y no ha olvidado ni dado la espalda ni a los empresarios y autónomos ni a los colectivos más vulnerables de la ciudad, ampliando las líneas de ayudas sociales a los más necesitados.

Para ello, Cerdera enumeraba las diferentes acciones que se han puesto en marcha en la entidad financiera como “la aprobación de una línea muy ventajosa para empresas y autónomos, aprobación de créditos ICO, moratorias hipotecarias y personales solicitados y continuando financiando a las familias, principalmente, en la compra de viviendas”.

Aún así, Caja Rural de Utrera ha presentado unas cuentas anuales “muy buenas”, cerrando el ejercicio 2020 con 1,2 millones de euros de beneficio.

Y todo ello, “después de realizar importantes aportaciones a los fondos de cobertura, resultado que permite incrementar la capitalidad de nuestra entidad destinando 934.000 euros a reservas y 120.000 euros al capital social materializados en aportaciones al capital de los socios”, detallaba Cerdera.

En un año difícil como fue 2020 y lo está siendo 2021, la entidad se ha volcado en su Obra Social, a través de la Fundación Caja Rural de Utrera, no abandonando sus colaboraciones sociales, ni al deporte ni al mundo de la cultura, “se ha hecho todo lo que ha estado en nuestras manos, dentro de lo permitido por la situación sanitaria”, declaraba Cerdera.

“Se han asignado más recursos (aumentando hasta los 247.000 euros el presupuesto destinado a Obra Social) en las ayudas a los más vulnerables apoyando a las entidades que velan por esos colectivos”.

Antonio Cerdera se mostró "orgulloso de estos resultados, de la fortaleza de Caja Rural de Utrera, que tiene capacidad y solvencia para seguir creciendo y hemos demostrado que podemos superar muchas dificultades".

El director general de Caja Rural de Utrera, Manuel Ramírez Sousa, presentaba a los socios el balance de las cuentas correspondiente al ejercicio 2020, así como los diferentes indicadores económicos que demuestran la “fortaleza y solvencia de la entidad, en un año que por las circunstancias sanitarias vividas, en todo el país, ha estado marcado por el descenso del consumo y el aumento de los depósitos”.

El director general de Caja Rural de Utrera destacaba que el “índice de morosidad se encuentra en el 1,8 %, cuando el del sector financiero en general se sitúa en el 3,8 %" y, también, los buenos resultados que Caja Rural de Utrera ha mostrado en lo referente al ratio de solvencia, “donde nuestra entidad tiene un 23,8 %, estando muy por encima del mínimo exigido regulador, que es del 8 %”.

El Estado de Alarma y las restricciones de movilidad han ocasionado un cambio importante en las relaciones que los ciudadanos mantienen con los bancos.

El aumento de la Banca Digital, evidentemente, también se ha notado en Caja Rural de Utrera aumentando en un 25,4 % las operaciones de banca electrónica.

Sin embargo, la entidad se siente satisfecha “porque se ha realizado sin dejar de lado nuestra forma de hacer banca cercana y de proximidad”, como expresó Antonio Cerdera.

También, Caja Rural de Utrera ha crecido en número de clientes, situándose al cierre del ejercicio 2020 en 28.000.