Los pleitos entre Santiago y Santa María protagonizaron la conferencia de Juan Luis Araujo

Utrera | Cultura Si Sevilla se caracteriza por las dualidades y las consiguientes rivalidades que esta ocasiona, Utrera no es menos y de todos es conocida la “pugna” entre las parroquias de Santiago el Mayor y Santa María de la Mesa sobre su antigüedad.

Y sobre eso se esperaba que versaría la conferencia del historiador utrerano Juan Luis Araujo, que presentaba, dentro de los actos festivos en honor al Apóstol Santiago, con el título “Inicio de los pleitos parroquiales entre Santiago el Mayor y Santa María de la Mesa”, aunque en su exposición quedó claro que estos no se iniciaron por reivindicar la antigüedad de una u otra.

Exhaustivo trabajo de investigación de Juan Luis Araujo, que no ha sido fácil pues poco hay documentado sobre ambas parroquias, por lo que ha tenido que recurrir a los archivos de Santiago el Mayor, del Arzobispado y de su Biblioteca.

Por la escasez de bibliografía, alrededor de este tema hubo mucha subjetividad, y los primeros que hablaron ello fueron Rodrigo Caro, que fue coetáneo al primer pleito; y Román Meléndez, que veló por los intereses de Santiago, como explicó Araujo en su conferencia.

Alrededor de 50 minutos necesitó el conferenciante para exponer el contexto histórico de la Utrera del siglo XVII, así como los datos más relevantes del pleito mantenido entre las dos parroquias, iniciado el 14 de abril de 1612 a raíz de una denuncia presentada por Pedro Vallejo Millán por la no asistencia del clero de Santiago a las celebraciones religiosas importantes de la parroquia de Santa María de la Mesa.

En ese punto se habló, por primera vez en la conferencia, de la antigüedad de Santiago, ya que Pedro Galindo, defensor de esta, esgrimió que “no tenía el clero tan obligación por ser más antigua”.

Este primer pleito duró dos años, en los que se sucedieron las vicisitudes por la pugna entre ambas parroquias, fallándose, finalmente, a favor de la parroquia de Santa María de la Mesa.

Según Araujo, en el fallo favorable a Santa María de la Mesa influyeron varios factores como el hecho de no estar documentada la antigüedad de Santiago, pues el único documento que acreditaba tal antigüedad, la fundación en 1287 de la cofradía de Santa Ana, parece ser fue borrado de forma premeditada por parte de personas próximas a la parroquia de Santa María.

Otro argumento en favor de esta es el hecho de la invasión musulmana, camino de Córdoba del rey granadino Mohamed IV, que en 1368 saqueó parte de Utrera, hizo prisioneros e incendió la parroquia de Santiago.

Este incendio hizo que el templo estuviera cerrado para los cultos durante 152 años. Este hecho jugó a favor de Santa María de la Mesa que hizo que prosperase al tener en ella presencia las familias adineradas de Utrera y, también, tuvo la influencia de las fortunas de las Américas.

Por todo ello, la Parroquia de Santa María de la Mesa no solo ganó el primer pleito sino los diez posteriores también.